Gracias por tanto, Matías. Buen viaje

Cuando una mascotita parte de nuestro lado deja un vacío tan grande que  nos hace pensar que nunca más tendremos otra con tal de no volver a sentir ese dolor.

Eso fue lo que pasó tras la pérdida de Rayo e Hicky.

Sin embargo, un día la historia cambió… Al salir de la casa la familia encontró a un pequeño perrito tratando de protegerse de la intemperie, al que se le brindó cobijo y un sitio donde ubicarse de manera temporal. Los días pasaron y aunque el pequeño salía de paseo, siempre volvía a su refugio, por ello la familia tomó la decisión de darle un hogar de manera permanente.

Así fue como llegó Matías, como “un regalo de Dios” después de aquellos momentos de tristeza.

Con su llegada, dos grandes heridas se sanaron: la de su pequeño y cansado cuerpo y la del corazón de su papá, quien permanecía sin consuelo tras la muerte de sus labradores.

Mati, como todos los conocíamos se encargó de recibir a su hermano Zeus, un Dogo de Burdeos al que le dio todo su cariño. ¿Cuál fue su respuesta? Cariño, protección y respeto.

El pequeño Mati también se encargó de recibir a Melike y Hugo, además compartió su vida con Hasky, Bruno y Kira.

Matías tuvo grandes privilegios: era el único que tenía permitido subirse al sillón y a la cama, el único que podía comer del plato de sus hermanos e incluso del de sus papás.

Fue un gran compañero de cada uno de los miembros de su familia humana. Estuvo con ellos en muchos viajes, además de momentos de alegría y también de soledad.

En Animal Rest dejó su huella como testamento, ayudando así a cada pequeño a regresar a casa con su familia, además, ha formado parte de la imagen de la empresa en trípticos y separadores.

Después, Mati enfermó. Padeció una enfermedad que poco a poco lo fue debilitando, sin embargo, gracias a su espíritu de lucha y el gran amor de sus papás, logró sobrellevarla para seguir recibiendo todo el amor y cuidados que estaban reservados para él.

Luego de varios meses Mati partió. Se fue estando en los brazos de su papá, los brazos que tanto cobijo le dieron a lo largo de su vida.

Descansa en paz, pequeño Mati. Descansa y juega con tu inseparable Zeus, que en tu casa y en Animal Rest te recordaremos siempre con un inmenso cariño.