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A que no sabías... Mitos y realidades sobre los mini pigs

Unos son rositas, con manchas y otros negritos todos muuuuuyyyy bonitos, eso sí. Pero… ¿Qué tanto conocemos a los mini pigs? ¿Es adecuado tener uno como mascota? Sigue leyendo y descúbrelo.

Existe la creencia de que los cerditos son sucios por naturaleza, sin embargo, lo que muchos desconocen es que son animalitos muy limpios. Requieren de cuidados especiales ya que su piel es muy delicada, lo mismo pasa con su alimentación, pues si no se cuida, pueden pasar de ser “mini pigs” a “big pigs”.

¿Quieres uno como mascota?

Mmmm, piénsalo bien. Antes de tomar la decisión, debes saber esto:

  • Requieren de un espacio amplio para vivir. Estos pequeños deben tener acceso a zonas al aire libre para que puedan desarrollar sus comportamientos naturales como hurgar en la tierra y las plantas.

  • Debes investigar más sobre él, ya que existe la posibilidad que no sea tan “mini” como te dijeron y llegue a pesar hasta 70 kilos (o más).

  • Son hermosos, pero… Les encanta mordisquear, rascar, arrancar plantas y remover tierra con su trompita.

  • No a todos les gusta convivir con mascotitas de otra especie.

Datos curiosos…

Estos pequeños tienen características muy particulares, aquí algunas de ellas:

  • Miden entre 30 y 40 cm y pesan cerca de 35 kilos. Sin embargo, algunas especies en particular pueden llegar a pesar más de 135 kgs en la adultez si no se alimentan adecuadamente.

  • Se reconocen seis especies de cerditos miniatura: vietnamitas o Pipona pig, Juliani o Painted mini pig, africano o de Guinea, Yucatán o mexicano pelado, Kunekune y de la isla de Ossabaw o Feral.

  • Su visión es muy mala, pero su olfato y oído son buenos.

  • Pueden tener enfermedades como las del ser humano, por ello es común que podamos transmitirles algunos padecimientos y ellos a nosotros.

  • Los cerditos nunca se limpian cerca del lugar donde duermen o comen, les gusta el lodo y el barro porque les ayuda a cuidar su piel y a refrescarse.

  • Comúnmente viven hasta 20 años, pero con buenos cuidados, pueden llegar a los 30.

Ahora que los conocen un poco más, qué opinas, ¿tendrías uno como mascotita?