Ser LíDER ALFA... Una idea pasada de moda
A todos nos ha pasado que queremos controlar la manera en que se comporta nuestro compañero canino en determinadas situaciones, pero por más órdenes que le damos, por más líderes que queramos ser y más consejos que tomemos por parte de amigos y hasta expertos, seguimos con los mismos resultados. Todo pareciera indicar que algo estamos haciendo mal o que el ser el “alfa” no está dentro de nuestras posibilidades y el lomito nunca aprenderá a ser tranquilo y educado.
Lamentablemente hemos vivido en una errónea afirmación la cual indica que dentro de la manada, o una familia, debe existir obligatoriamente un “líder alfa” que mantenga a todos a raya, que sea el ejemplo a seguir y también el más fuerte de todos. Esta teoría tiene su origen en el siglo pasado propiciando la idea que el Macho Alfa debería fungir como líder no solo en la vida silvestre, sino también en la vida diaria del ser humano.
Uno de los primeros estudios fue realizado en los años 30’s por Rudolph Schenkel quien puso su atención en un par de manadas de lobos que estaban en cautiverio dentro de un zoológico en Suiza. Sus conclusiones indicaban que la estabilidad de la manada se basaba en dos figuras principales: el macho líder y la hembra líder. Posteriormente comparó estos resultados y sus experiencias con perros para afirmar que éstos últimos se comportaban de manera similar a los lobos y, dentro de su entorno, los propietarios eran quienes llevaban el papel de “macho o hembra líder”.
Afortunadamente David Mech llegó años después para estudiar a los lobos americanos dentro de su hábitat natural y desmentir totalmente a Schenkel. En sus observaciones pudo constatar que los lobos salvajes no se agrupaban en manadas ni tenían un líder, por el contrario, confirmó que ellos vivían en familias compuesta por un padre, una madre y los cachorros; no existía competencia alguna por el liderazgo del grupo.
Durante el sigo XXI han continuado las investigaciones científicas en relación con nuestros compañeros cuadrúpedos para comprender su genética, su anatomía y las características que hacen similares o diferentes a determinadas razas de acuerdo con sus cualidades. Importantes universidades a nivel mundial se han enfocado en comprender la interacción de los perritos con sus propietarios y más esencialmente, la forma en que se comunican entre ellos para ayudarlos a resolver problemas de conducta, socialización y de salud para que, finalmente se obtenga un equilibrio.
En México una de las pioneras en estos estudios es Gaby Portilla quien ha pasado más de 10 años estudiando apasionadamente al mejor amigo del ser humano y buscando la manera de fomentar una sana convivencia perro-persona. A través de Dog Sensitive® ayuda a conectar a las personas con sus mascotas enseñando a escucharlas y traduciendo con claridad qué es lo que les está diciendo con su comportamiento.
Con base en su investigación, observación y experiencias, ha podido desarrollar Canine Mirroring Therapy® para ayudar a equilibrar las dinámicas familiares en las que hay uno o más lomitos, apoyándose lo que ellos expresan con su lenguaje, conducta y estado de salud. Gaby está totalmente convencida de que no es necesario educar a tu peludito bajo un régimen de adiestramiento, cadenas de castigo ni jaloneos para poder tener una relación armónica con él. Los elementos necesarios para lograrlo son excelente comunicación, un buen vínculo afectivo, confianza y sobre todo respeto.
Con este nuevo modelo tanto Gaby Portilla como investigadores de otros países buscan romper el esquema “tradicional” de educar a tu lomito con métodos arcaicos demostrando que eres el líder que debe ser respetado. Ellos prefieren fomentar una convivencia sana sabiendo cuál es el rol de los lomitos dentro de la dinámica familiar identificando la relación que hay entre el estado de salud y su comportamiento comparándolo con las emociones y problemas de las personas. Con esta información brinda estrategias y puntos esenciales en los que debes trabajar para el bienestar de la familia (sí, incluyendo a tus perritos).
Ahora cuentas con una excelente opción para aprender a comunicarte con tu mejor amigo no solo físicamente, sino también de manera emocional, energética y espiritual. Sabemos que siempre buscarás darle una mejor vida a tu peludito, permite que él te ayude a ser la mejor versión de ti mismo.